ISSN 2773-7705
Periodo. Enero – Junio 2021
Vol. 4, Nro. 1, Publicado 2021-06-30
https://revistas.itsup.edu.ec/index.php/higia
causas entre ellos el riesgo ocupacional o laboral que
ahora en la actualidad ha conllevado al ser humano una
serie de cambios y modalidades laborales, debido a la
situación que hoy enfrenta todos los países del
mundo(1).
Mediante la herramienta informática internet se ha
desarrollado considerablemente la figura laboral del
teletrabajo, constituyéndose en una modalidad de
trabajo novedosa puesto que, obedece a las nuevas
tecnologías de la información y comunicación que
avanzan cada vez con mayor rapidez (2). En Europa y
Estados Unidos, el teletrabajo es ampliamente
utilizado desde hace más de 5 años y en América
Latina, su introducción es reciente. No obstante, en
Ecuador es poco conocido y su uso es menos empleado
(3).
Aún no se ha cumplido medio siglo desde la
configuración del teletrabajo en Estados Unidos y, sin
embargo, su internacionalización y posesión alrededor
del mundo ha sido vertiginosa, obteniendo distintos
grados de impacto en variadas disciplinas. La dinámica
de este fenómeno ha generado nuevos desafíos de
investigación, que están siendo desarrollados con
perspectivas e intereses distintos, adquiriendo en este
último tiempo una mayor significancia para la salud
ocupacional en pos de identificar y prevenir riesgos
laborales que menoscaben el bienestar y calidad de
vida de los teletrabajadores (4).
Sin embargo, se aprecian panoramas distintos respecto
a las tendencias de aplicación de las diversas
modalidades de teletrabajo en la Unión Europea y
Norteamérica, que en Latinoamérica y El Caribe.
Mientras que en Europa y Norteamérica el teletrabajo
móvil y suplementario muestran tendencias de ascenso
en su aplicación, el teletrabajo permanente y desde el
hogar muestran efectos contrarios, en donde la salud
ocupacional puede verse afectada en el teletrabajador,
en cambio, en América Latina y El Caribe las
modalidades más aplicadas en el teletrabajo son
recientes que van desde el hogar, los telecentros
comunitarios, call centers y el teletrabajo
transfronterizo u offshore (5).
Si bien la medición del teletrabajo es un proceso
emergente, incluso para los países más desarrollados,
algunos países han logrado avances importantes tanto
en la medición como en la adopción de esta práctica
laboral (Holanda, Estados Unidos, Inglaterra,
Alemania, etc.). En contraste, América Latina aparece
como una región que no ha logrado un consenso en la
temática y por ende no ha encontrado un camino fácil
para la medición del fenómeno(6).
Así mismo la Organización Mundial de la Salud
(OMS), señala que el teletrabajar desde el hogar
incrementa riesgos laborales en la salud del trabajador.
Por lo que esta nueva era del teletrabajo requerirá un
uso mucho más amplio de un nuevo tipo de gestión
basado en la confianza y en la obtención de resultados
y una nueva forma de trabajar que es más autónoma,
teniendo en cuenta las perspectivas de los trabajadores
en relación con los desafíos y oportunidades del
teletrabajo (situación familiar y de vida, tipo de
función, aptitudes), pudiendo verse afectada por
riesgos labores(7).
La implementación de dicha modalidad en el Ecuador
requiere vigilancia de la salud y seguridad del
trabajador. Al mismo tiempo, esta modalidad ofrece
alternativas muy innovadoras y beneficiosas tanto para
el empleado, así como para el empleador, y la empresa,
sin embargo, durante el transcurso de la historia
ecuatoriana en el ámbito laboral, esta figura ya fue
utilizada antes de su regulación, pero de manera
informal. Y es que recientemente, se aprobó la
normativa que reglamenta esta forma de ejecución de
las actividades laborales, permitiendo a los
teletrabajadores sujetarse a un régimen determinado y
específico que les brinde una mayor protección de sus
derechos (8).
Su característica fundamental es permitir la prestación
de servicios laborales en un lugar distinto al habitual,
pudiendo no solamente ejecutar el trabajo desde el
domicilio del trabajador, o en un telecentro, sino
incluso desde dispositivos electrónicos móviles (como
teléfonos celulares con acceso a las TICS). Se parte de
una serie de situaciones que, por tratarse de una
modalidad nueva en el Ecuador contempladas en el
acuerdo ministerial 190-2016 y norma técnica 90-
2017, todavía no han sido abarcadas totalmente, siendo
una de ellas y materia de este trabajo investigativo,
enfocarnos en el estudio de los riesgos laborales en el
teletrabajo. La normativa vigente solamente establece
la obligación del teletrabajador de acatar y cumplir de
manera adecuada cada una de las políticas de seguridad
establecidas, prestando así, sus servicios de forma
segura y carente de peligro para su salud, a su vez,
señala la obligación y responsabilidad de los
empleadores de velar por la seguridad y salud
ocupacional de estos trabajadores, asegurando y
cumpliendo con las condiciones de higiene y seguridad
previstas por la normativa actual, lo que impone al
empleador, capacitar a sus trabajadores sobre la
materia en su empresa(9).
El problema central en esta investigación se direcciona
en que actualmente los docentes de la Facultad de
Ciencias de la Salud de la Universidad Estatal del Sur
de Manabí, se encuentran realizando sus labores de
docencia por teletrabajo, usando diversas plataformas
virtuales, estas actividades laborales son aquellas que
deben de realizarse desde casa, por lo que, pueden
ocasionar mayor carga de trabajo, ya que las
obligaciones laborales, más las obligaciones cotidianas
dentro del hogar, pueden duplicarse debido a las
complicaciones de tener que realizarlas desde el hogar,