ISSN 2773-7705
Periodo. Enero – Junio 2020
Vol. 2, Nro. 1, Publicado 2020-06-30
https://revistas.itsup.edu.ec/index.php/higia
prevalencia, asociado con un incremento en el
envejecimiento de la población y a factores de
riesgo, específicamente los relacionados el
tabaquismo, la mala alimentación, la inactividad
física, el consumo de alcohol y una falta de
adherencia al tratamiento farmacológico.
Las guías clínicas vigentes sobre el tema hasta el
año 2017, plantean que cuando el paciente
manifiesta incrementos continuos de presión
arterial (PA), donde la presión sistólica sostenida
se encuentra por encima de 140 mm Hg o la
presión diastólica sostenida mayor de 90 mm Hg
(en al menos 3 visitas), se puede hablar de HTA
. No obstante, en la guía aprobada en el año 2018,
estos valores se reducen, considerando
hipertensión arterial cuando estos valores son de
130 mm Hg y de 80 mm Hg, para la presión
arterial sistólica y diastólica, respectivamente
(Diaz -Molina & Polo-Vega, 2019)
Según la Organización Mundial de la Salud
(OMS) y la Organización Pnamericana de la
Salud(OPS) la hipertensión arterial afecta más
del 30% de la población adulta mundial y es el
principal factor de riesgo para padecer
enfermedades cardiovasculares, especialmente
enfermedad coronaria y enfermedad
cerebrovascular, pero también para la
enfermedad renal crónica, la insuficiencia
cardíaca y la demencia. La carga de hipertensión
recae de forma desproporcionada en países de
ingresos bajos y medianos, que tienen dos tercios
de los casos, en gran parte debido al incremento
de los factores de riesgo en esas poblaciones en
las últimas décadas
La hipertensión arterial (HTA) constituye un
importante problema de salud pública en los
países industrializados, se estima que alrededor
de un 20% de la población adulta es hipertensa.
Según la Organización Mundial de la Salud
(OMS), uno de cada cinco adultos padece de
tensión arterial elevada, un trastorno que
ocasiona aproximadamente la mitad de todas las
defunciones por accidente cerebrovascular o
cardiopatía. Las complicaciones derivadas de la
hipertensión son la causa de 9,4 millones de
defunciones cada año en el mundo, problemática
presente en varios países del mundo, y acentuada
en Latinoamérica. (files.sld.cu)
En América Latina la prevalencia de hipertensión
arterial es del 20% . Entre los países que
presentan cifras representativas de esta
enfermedad son Cuba 44%, Argentina 26 y 32%,
Brasil 22 y 32,7%, Venezuela 15.9% y 39.2% y
Ecuador con 28.7% en personas adultas. Se
considera que una de cada dos personas que se
diagnostica con hipertensión abandona el
tratamiento antes de los seis meses, la mayor
parte de la población lo hace porque refiere
sentirse mejor, no presenta síntomas o manifiesta
que los fármacos le hacen daño (Carrillo Bayas,
Determinantes de salud que influyen en la
adherencia al tratamiento en pacientes con
hipertensión, 2019)
Entre los factores de riesgo para enfermedad
cardiovascular, la hipertensión es uno de los más
importantes. Afecta a casi mil millones de
personas y provoca el 8% de muertes en todo el
mundo. El número total de adultos con
hipertensión en todo el mundo en el 2000 fue de
972 millones; es probable que de acuerdo a estos
datos aumente en un 60% a un total de 1560
millones en el 2025, La prevalencia en los
estudios por la OMS fue de 10,4% (Mujeres:
9,7%; Hombres: 11,9%) y de HTA conocida de
8,6% (Mujeres: 9,7%; Hombres: 6,3%),
representando una prevalencia global del 19%
(19,4% en mujeres y 18,2% en hombres) cifra
que ha llevado a que la HTA se considere un
problema de salud pública mundial tanto en
países económicamente desarrollados así como
en países en vías de desarrollo. (scielo, s.f)
En Ecuador el porcentaje de pacientes con
hipertensión es un poco más elevado en
hombres que mujeres. Desde el año 2015, la
hipertensión arterial y otras patologías
relacionadas superan los 7.500
egresos hospitalarios al año. En el 2017 se
reportaron 5.776 solo por hipertensión primaria,
según el registro estadístico de Egresos
Hospitalarios del Instituto Nacional de
Estadísticas y Censos (INEC). (Silvano Bertozzi,
2019)
La hipertensión arterial es una enfermedad que
ha ido aumentando a la par y como consecuencia
del desarrollo económico mundial, la
concentración de la población en las grandes
ciudades, el envejecimiento y la globalización
económica, estos estilos de vida son factores
perjudiciales para la salud. (salud.gob.ec, 2018)
Su prevalencia es de entre un 45% a un 30%
dependiendo del desarrollo económico de cada
país, siendo en general mayor en los países con
menores ingresos. Además de ser la hipertensión
una enfermedad en sí misma, se reconoce su
carácter de factor de riesgo en el desarrollo de
enfermedades cardiovasculares. (salud.gob.ec,
2018)
Según la OMS, la adherencia terapéutica se
define como: el nivel del compromiso del
paciente en cumplir las indicaciones de su
médico en cuanto a la toma del medicamento, al
cambio de su hábito alimenticio y estilo de vida
sedentario (Carrillo Bayas, Determinantes de
salud que influyen en la adherencia al tratamiento
en pacientes con hipertensión, 2019). La
adherencia es la estrategia que permite que el
paciente mantenga y continúe el tratamiento para
lograr cambios significativos en su salud,