ISSN 2773-7705
Periodo. Julio – Diciembre 2022
Vol.7, Nro.2, Publicado: 2022-12-31
https://revistas.itsup.edu.ec/index.php/Higia
de NAVM (18). De esta manera, Castillo
et al (19) refiere que los profesionales de
enfermería deben conocer las
precauciones estándar y de bioseguridad,
tal como la aplicación de los 5 momentos
del lavado de manos. En concordancia,
Ramos (20) manifiesta que entre las
prácticas de enfermería para la
prevención de la NAVM está el lavado
de manos como medida general y
efectiva para la prevención de IAAS. En
la misma línea, Iparraguirre (21) enfatiza
que el lavado de manos es una medida
preventiva, puesto que las manos son un
reservorio de microorganismos
patógenos y no patógenos y constituyen
el principal vector de transmisión en los
establecimientos de salud. Por el
contrario, Díaz (22) manifiesta en su
investigación que las medidas de
bioseguridad por diferentes dimensiones
son, precauciones generales, equipo de
limpieza y esterilización, manejo y
eliminación de desechos.
En cuanto a los procedimientos que
realiza el personal de enfermería en los
pacientes críticos con NAVM, se
identificaron, la asistencia a la
intubación prolongada, reintubaciones,
trasporte del paciente y aspiración de
secreciones, según lo descrito por Yunga
et al (23). Igualmente, Coppadoro et al
(24) agrega que los procedimientos son
el cuidado de las vías respiratorias
mediante el control de la presión del
manguito y la limpieza del tubo
endotraqueal o el uso de un sistema de
succión cerrado. Por su parte, Zaraguro
et al (25) manifiesta que entre los
procedimientos del protocolo en
pacientes con ventilación mecánica se
describen la aspiración de secreciones y
la verificación de la existencia de
cuerpos extraños en la cavidad. Osti et al
(26) también argumenta que entre los
procedmientos están la la aspiración
correcta y la colocación de la cabecera de
la cama en un ángulo de 30° a 45° a
menos que esté médicamente
contraindicado, al igual que Mendoza
(27), que indica que la posición de la
cabecera entre 30-45º es una práctica
importante para la prevención de
NAVM. Por su parte, Geravandi et al
(28) concuerda con las prácticas
presentadas, ya que menciona en su
trabajo que la correcta aspiración de la
vía aérea, el cumplimiento de las
técnicas asépticas, la correcta descarga
del manguito del tubo, la fisioterapia
torácica, el correcto cambio de
posiciones y la higiene bucal se relaciona
con la disminución de la NAVM y son
prácticas enfermeras a las cuales debe
prestarse atención para la manipulación
de pacientes con ventilación mecánica.
Por el contrario, entre los procedimientos
de enfermería en pacientes con