Revista Sinapsis. ISSN 1390 – 9770 
Vol. 1, Nro 23, diciembre de 2023  
https://www.itsup.edu.ec/sinapsis 
 
Las raíces del surgimiento del interés en la resiliencia por el campo de la psicología, tiene 
lugar en el año 1955, con el estudio longitudinal desarrollado por Emmy Werner y Ruth 
Smith, en el que estudiaron, a lo largo de 30 años, una cohorte de 698 niños nacidos en 
las Islas Kauai (Hawai) en condiciones desfavorables. En el estudio se encontró que el 
80% de la muestra no presentaban comportamientos psicopatológicos siendo adultos, por 
el  contrario,  eran  personas  optimistas,  de  visión  positiva,  adaptados,  competentes  e 
integrados a su contexto social y cultural. La investigación, a pesar de haberse realizado 
en  un  contexto  diferente  a  la  resiliencia,  ha  tenido  relevancia  significativa  en  su 
surgimiento y desarrollo posterior (Kotliarenco, Cáceres & Fontecilla, 1997). 
A  partir  de  aquellos  momentos,  se  realizaron  varios  estudios  sobre  resiliencia  en  la 
infancia,  que  se  remontaron  a  la  observación  de  comportamientos  individuales  de 
superación,  que  parecían más casos aislados y anecdóticos; por otro lado,  al  estudio 
evolutivo de niños que habían vivido en condiciones difíciles, como pobreza extrema y 
psicopatología  de  los  padres,  entre  otros  (Luthar,  Cicchetti,  &  Becker,  2000).  Más 
adelante, el enfoque de los estudios sobre resiliencia logra trascender la mirada tradicional 
de adversidad versus presencia de psicopatología, a la de adversidad versus posibilidad 
de adaptación exitosa (Pan & Chan, 2007). 
En síntesis, la resiliencia puede transformar o fortalecer a aquellas personas enfrentadas 
a la adversidad, manteniendo conductas de adaptación, permitiendo un desarrollo normal 
o  promoviendo  un  crecimiento  más  allá  del  nivel  de  funcionamiento  presente.  Así 
entonces,  se  puede  identificar  como  resiliencia  en  los  estudiantes  con  problemas  de 
conducta,  a  la  capacidad  de  éstos  para  superar  las  dificultades  y  evitar  resultados 
negativos, en términos conductuales, psicológicos, académicos, e incluso, físicos. 
La resiliencia desde el ángulo del género 
De acuerdo a los antecedentes empíricos asociados con las características internas, no se 
poseen evidencias concluyentes respecto de la relación entre resiliencia y género. Se 
puede observar que las diferencias en la puntuación total de los factores de resiliencia 
entre hombres y mujeres, no evidencian resultados estadísticamente significativos (Prado 
& del Águila, 2003; Saavedra, Castro & Inostroza, 2012), pero si se han identificado 
diferencias en el área de la interacción (Prado & del Águila, 2003) y en el área del apoyo 
social (Palomar & Gómez, 2010). 
Al considerar el escenario de controversia en torno a los resultados obtenidos a través de 
diferentes estudios, el propósito del trabajo radica en profundizar en la temática de la 
resiliencia en estudiantes de la EGB, comparando los factores de resiliencia desde el 
ángulo de género. 
La conducta en la escuela